Niños, niñas y familias colombianas siguen siendo víctimas de políticas públicas que desconocen la obligatoriedad de los gobiernos de tomar las decisiones que más favorezcan el desarrollo humano, la integridad y la vida de las personas en más alto nivel de vulnerabilidad psicosocial.

La catástrofe ocurrida el primero de abril de 2017 en Mocoa Putumayo donde murieron cientos de personas y entre ellos niños y niñas, obliga a los más de 1.115 alcaldes que tiene Colombia para que a través de los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo se diseñen, implementen y se autofinancien políticas públicas que eviten más catástrofes naturales.  –La prevención del riesgo constituye una labor obligada de defensa de los derechos humanos tanto del gobierno nacional, departamental, municipal y por parte de las comunidades de base y las familias, entre otros.

En 1.985, año en que ocurrió el peor desastre natural en Armero Colombia; una tragedia anunciada que nadie evitó y donde murieron más de 25.000 personas y hoy, transcurridos 31 años vuelve nuevamente a ocurrir un desastre en similares circunstancias en Mocoa Putumayo, un desastre natural que cobró la vida de más  de 313 personas donde cientos de ellos fueron niños y niñas.

ninno colombia – voluntarios para la infancia  y Antioquia, primero MIS derechos, se solidarizan con la niñez y las familias de Mocoa Putumayo y lamenta la pérdida de tantas vidas humanas.

_______ Redacción: José Gañan Bedoya - coordinación ninno colombia, abril de 2017.